miércoles, 8 de agosto de 2007

200 años de "herencia"


He regresado de un "sueño" - de recibir una "gracia"- porque eso ha sido nuestra estancia el La Puye-nuestra vivencia del Carisma-las Oraciones y Eucaristías-la convivencia con tantas personas buenas y generosas: Hijas de la Cruz-sacerdotes-jóvenes-seglares amigos.

Gracias Marta y Consejeras-gracias hermanas que tanto habeis trabajado para que este Triduo dejase una huella en quienes hemos tenido la suerte de celebrarlo.

Gracias a las que, sin haceros nota, habeis trabajado para que todo esté a punto y que tanta amabilidad nos habeis atendido.

¡Todo ha merecido la pena!

Nuestros Fundadores desde el Cielo nos miran con amor y nos bendicen.

No hay lugar al "pesimismo" la Congregación tiene vida, tenemos mucho que hacer y las fuerzas no nos van a faltar, porqu aunando fuerzas es como se puede vivir.