sábado, 5 de mayo de 2007










Descubrir el Corazón de Molante Iª PARTE

El día 30 de Abril tuve la suerte de descubrir el corazón de Molante, en la región de Poitiers Charantes, en Francia, un encuentro que nunca olvidaré.

Mi Superiora provincial, Sor Ascen Fernández, me había invitado a participar, en nombre de la superiora general, para presentar el Blog de Molante al consejo general de las Hijas de la Cruz, que estos días están en la Puye (Casa Madre). Mi estancia en la Región de Limoges en Francia, por asuntos personales, permitía poder acercarme hasta allí.

Tomé la autopista dirección a Paris A 20 y en St. Marcel, me desvié, tomando la nacional y atravesando el champagne francés de la Región de Poitiers. El paisaje era esplendido, sus pequeñas villages, estaban cargadas de historia y ofrecían relax y sosiego. Atravesé, diferentes “villes” como Le Blanc, Nalliers, la Bussiére en dirección a la Puye. Luego supe más tarde que estos pequeños pueblos fueron las primeras fundaciones de las Hijas de la Cruz en Francia, según descubrí en el propio Molante, gracias a las explicaciones de Sor Magdala, una autoridad en el conocimiento de Molante.

Llegando a la Puye, la duda me surgía porque no se divisaba la imagen del monasterio que de la Casa Madre tengo. Pensaba que debería preguntar alguien a la llegada a la Puye por el Monasterio de les “Filles de la Croix”, mientras esto iban pensando, me detuve en un cruce y giré a la izquierda. Al mirar, se presentó enfrente de mí un gran edificio dominado por la Iglesia del Monasterio; era ese el lugar, no había duda. Me acerque con mi coche a la puerta más próxima a la iglesia, y como si de la llegada a c tratara, había allí una mujer bajitasa sea, con el pelo blanco a la que reconocí en el momento, no por su nombre, ni porque la hubiera visto nunca, sino porque llevaba sobre su pecho la cruz de la Hijas de la Cruz. Le pregunte si esa era la casa de las Hijas de la Cruz, era evidente que si y le dije que era un profesor de España de las Hijas de la Cruz y que tenía cita con Sor Ascen Fernández, Superiora provincial de España y con Marta Perrugorria, Madre general. Al momento me indico donde podía aparcar y me dijo que me esperaban. Salió corriendo. Parecía haber llegado a casa. En varios minutos , se acercó a mi coche , Sor Maite Heredia , Hija de la Cruz de España , que conocí en el colegio de Sestao , lleva ya tres años formando parte del Consejo general de la Orden en Francia y habíamos trabajado hace tiempo en varios asuntos de mi colegio. Ella hizo de anfitriona en todo momento y estuvo pendiente de mi estancia las horas que pase con ellas. Me invitó a conocer todos los lugares más significativos de la Casa Madre, desde la sala Capitular, la casa de San Andrés Huberto, la Iglesia donde reposan los restos de Sta. Isabel y San Andrés, el cementerio de las Hermanas con la tumba de Marlene Moureau, la primera superiora general de la Casa, la capilla del cementerio; la Habitación de Sta. Isabel , incluso la “cave” del Monasterio fontenebrista, donde me informó que estaban pensando hacer un oratorio. La belleza del lugar y la carga de emociones eran inmensas, después de haber escuchado y leído tanto sobre Sta Isabel y San Andrés Huberto; sobre todo este año, como responsable del Blog de Molante. Descubrí lugares que evidentemente poseen una significación fuerte. Desde que era alumno en el colegio, hasta ahora que formo parte de los docentes del colegio de las Hijas de la Cruz, siempre había oído hablar de la vida de San Andrés y Sta. Isabel. Pensaba en Sor Loli ( Ujué) , cuando en cuarto de primaria , nos contó las aventura de San Andrés, cuando se escondió en un armario , para evitar ser detenido; o cuando Sor Natividad en quinto de primaria , nos hablada de su paso por el noviciado en Fuenterrabia y la toma de los votos en la Sala capitular de La Puye , o en Sor Lucita , que me enseñó no hace mucho tiempo una foto de sus padres y ella, cuando tomo los votos también en la misma Sala Capitular en los años 50.Era evidente que ese lugar estaba lleno de vida desde hacía casi 200 años y que había influido en mi propia vida.

1 comentario:

Maite Heredia dijo...

Hola, me alegra y nos alegra que haya sido tan buena, enriquecedora y gratificnte tu visita a nuestra casa madre y a Molante.
Nosotras también peregrinamos allí el 1 de mayo. Fue un día extraordinario en todos los aspectos y tuvimos la gracia de celebrar la Eucaristía en el primitivo oratorio.
Os tuvimos presentes a todos/as los que trabajáis con nosotras de una u otra manera... participáis de nuestra misión, que es la vuestra y habéis empezado a gustar el carisma que el Señor legó a la Iglesia por medio de S.Andrés Huberto y Santa Juana Isabel.
¡Ánimo y adelante! Con Cristo, luz del mundo...¡Otro mundo es posible!